La fase fálica es una de las fases pulsionales de la teoría sobre el desarrollo psicosexual de Sigmund Freud. Sobreviene a continuación de la fase anal y tiene lugar en la primera infancia, entre las edades de 3 y 5 años. En esta etapa, la zona erógena predominante son los genitales (clítoris en el cuerpo femenino y pene en el cuerpo masculino) El niño comienza en ese momento a darse cuenta y a comentar las diferencias entre los hombres y las mujeres, su inquietud incrementa de manera significativa si se notan las diferencias anatómicas. y las sensaciones placenteras se obtienen en el niño y la niña al tocarse sus genitales (no tiene nada que ver con el placer sexual adulto). Según la teoría freudiana, en la etapa fálica puede desarrollarse el complejo de castración en los niños y en las niñas la denominada envidia del pene. mientras en el niño el complejo de castración marca la salida del complejo (ante la amenaza de ser castrado, renuncia a sus deseos incestuosos hacia la madre), en la niña la organización fálica determina su entrada al complejo: el descubrimiento de que no posee un pene produciría la envidia de este, al tiempo que provocaría sentimientos de rabia y resentimiento contra la madre por no haberle dado uno, inclinándose la niña hacia su padre como objeto de amor, en la teoría freudiana el falo, funciona como un equivalente simbólico del pene.
Freud especifica con el término fase fálica la primera maduración genital.
Comentarios
Publicar un comentario